De sorpresas y regalos de la vida va la historia de esta chica de ideas claras y paso firme. Azahara Collado Pérez, Jenny para todo el mundo, es un claro ejemplo de que se puede amar la hostelería desde el salón del restaurante con tanta pasión o más, que desde los fogones. Disculpadme que lo remarque, pero es que personas como ella no se entrevistan tan a menudo, y yo me sorprendo. En la entrevista de hoy Jenny viene a ser un ejemplo vivo de que la pasión por la profesión mueve montañas. Tener claro un objetivo y trabajar para que se cumpla siendo siempre fiel a tu instinto funciona, y además la vida te puede enviar regalos maravillosos. Dentro la entrevista de Jenny, dueña y señora de Restaurante El Cup Alicante.
"Al final mi trabajo es un día a día y mi vida laboral también es mi vida personal". Jenny Collado no paró de moverse hasta que encontró "su sitio". Desde pequeña lo tuvo claro y el Restaurante El Cup se cruzó varias veces en su vida, mostrándole una y otra vez el camino a seguir. Pero la ambición de Jenny por desarrollarse profesionalmente no puede escribirse sin comentar la dedicación a su clientela. "Tengo clientes que saben que para lo que lo que necesiten yo estoy ahí, porque al final forman parte de una familia que se crea a lo largo de muchos años y son personas con las que tienes ese vínculo". Esa visión no la tienen todos y es lo que marca la diferencia.
Bueno Jenny, nos encanta este lugar, es muy bonito y acogedor: Gracias Ana, esa era la idea desde el principio. Lo que queremos aquí es que el cliente se sienta como en casa nada más entrar.
Sabemos que tienes una gran historia, pero empecemos desde los inicios. Tú tenías muy claro qué querías ser de mayor ¿verdad?: ¡Sí!. Desde muy pequeña me encanta la restauración. Es algo que he llevado dentro siempre. Ya cuando tenía 8 años en vez de jugar con muñecas jugaba a tomar nota de comidas a mis padres, a servirles… Es muy curioso (risas), porque llevo sintiendo esta profesión desde muy pequeña.
¡Qué bonito!, se nota que te gusta de verdad. ¿Cómo fue tu formación?: Cuando acabé el instituto sabía que lo que quería era estudiar hostelería y empecé a informarme y descubrí que estaba la Escuela de Hostelería de Alicante, en el famoso Centro de Turismo (CdT). Es ahí donde comencé los estudios de Profesional de Sala, y me encantó. Ese tipo de cursos te prepararan para salir a la vida laboral en cuanto terminas, pero yo quería estudiar cocina, tenía el gusanillo y quería experimentarlo. Al sacar un sobresaliente en el curso de sala me permitieron estudiar cocina en el mismo centro.
¿O sea, que además eres cocinera?: En teoría sí (risas). La verdad es que me di cuenta de que me gusta mucho más estar fuera en contacto con el cliente. Pero creo que es muy importante conocer el producto que sirves y saber cómo se elabora para poder explicárselo bien al cliente.
Y casualidades del destino, el restaurante El Cup de San Juan ya se cruzó en tu vida por aquel entonces: Así es, mientras estudiaba en la Escuela de Hostelería, iba a trabajar allí los fines de semana. El restaurante lo regentaba un amigo mío y me permitió compaginarlo. Yo tenía 18 años y estuve allí trabajando durante 3 o 4 años más o menos.
Y cuando ya has acabado la formación te vas a conocer mundo: Cuando acabé los cursos dejé El Cup porque me apetecía investigar otras cosas. Estuve en Noruega durante un mes formándome, por ejemplo. Hice varias cositas para ganar experiencia y regresé para entrar a formar parte del equipo de Restaurante Bodega Vinícolas de San Juan. Allí estuve dos años y fue impresionante trabajar con ellos. Me dieron la oportunidad incluso de estudiar un Máster de Sumiller aquí en la Cámara de Comercio de Alicante y gracias a eso descubrí mi siguiente aventura (risas).
Pero la cosa no acaba aquí, porque sabemos que después te fuiste a China, ni más ni menos: Efectivamente, a China. Estuve dos años allí con un proyecto hostelero y fue una experiencia impresionante, pero también fue dura. Allí la situación es diferente y para las mujeres hosteleras es muy complicado desarrollar tu carrera profesional en igualdad de condiciones. Tras intentarlo durante dos años al final decidí volverme, no era mi lugar, no era mi gente, mi forma de ser...
Decides regresar a España, directa al Norte: ¡Sí! necesitaba reponer fuerzas así que me fui a trabajar con Martín Berasategui. Fue mi salvación. Me fui unos meses allí y me recuperé por completo. Recuperé mi vida, a mí misma como persona, mi felicidad... Volví de allí con el objetivo cumplido: ser feliz. Además, lo mejor de haber trabajado allí, sin duda alguna, son los compañeros que tenía. Una de ellas trabaja ahora aquí conmigo: Cristina.
Y ahora sí, retomas tu relación con El Cup de San Juan: Sí, con 27 años firmé el contrato para quedarme con el restaurante El Cup de San Juan. Yo seguía manteniendo mucha relación con el dueño, cuando regresé me lo ofreció y no lo dudé. Conocía el lugar y les tenía mucho cariño a los clientes, y a la vez fue una prueba para mí. Quería ver cómo me desarrollaba siendo la propietaria de un negocio.
Estuviste dos años en San Juan, y finalmente decides trasladar el restaurante al centro de Alicante. Cuéntanos cómo fue ese proceso: Ese proceso tiene nombre y apellidos, pero solamente revelaré lo primero. En mi vida apareció una persona muy especial: Vicente. Él era un hombre muy mayor, cliente de El Cup San Juan. Era viudo y siempre venía con su hija a comer. Con el tiempo entablamos una relación de amistad muy bonita. Un día me comentó que él tenía un local en Alicante y que estaba en desuso desde hacía muchos años, y me lo ofreció. Vine a verlo con él y fue un flechazo. Cuando entré lo tuve claro, pensé: “Me siento aquí".
Hay personas que llegan para enseñarnos y ayudarnos en la vida ¿verdad?: Exacto, Vicente fue un auténtico regalo en mi vida. Empezó a ayudarme con la reforma y nos hicimos muy buenos amigos. ¡Tendrías que haberle visto el día que inauguramos! Él estaba feliz. Por desgracia falleció tras la inauguración. Fueron momentos muy duros y muy agridulces para mí.
¡Vaya historia Jenny!: Lo sé. Le estoy enormemente agradecida. Es por ello que también este lugar tiene algo especial.
Dinos, para ti, ¿qué distingue a un buen jefe de sala en un restaurante?: Yo siempre digo que ya seas jefe de sala o camarero o lo que sea, eres el que está dando la cara al público, y tienes que ser consciente de ello. Yo lo que hago es intentar solucionar todas las dudas que pueda tener el cliente, hacérselo todo más fácil. Si estás en este mundo es porque te gusta y eso se tiene que notar. Sobre todo, una sonrisa, educación y simpatía, es lo primero que tienes que tener cuando alguien entra a tu local.
¿Cómo definirías la cocina de Restaurante El Cup de Alicante?: Es una cocina muy tradicional, muy de casa, pero bien elaborada y bien presentada. Aquí cuidamos los detalles, por ejemplo la vajilla y la decoración, y también cuidamos la procedencia de la materia prima, que sea de temporada y de mercado. La idea que quiero transmitir al cliente es que se sienta completamente como en casa, es por ello que la distribución es así. Queremos que el cliente no piense, solo que disfrute.
Y la verdad es que el disfrutar en este local es fácil, sólo con contemplar la decoración ya lo haces: Eso es gracias al decorador que me ayudó en todo el proceso de reforma del local. Emilio Cayuela se implicó en este proyecto y consiguió darle este aspecto tan hogareño y agradable. Es un gran profesional que supo plasmar mi idea totalmente. Le estoy muy agradecida por ello.
¿Y mantiene la base de sus inicios en el local de San Juan?: Sí, efectivamente. La base es la misma ya que allí el estilo de cocina era similar, pero hemos evolucionado en algunas recetas y presentaciones, en técnicas, etc. Digamos que es un paso más. Eso sí, aquí mantengo algunos platos que ya estaban en carta en la primera etapa de El Cup de San Juan, como el bacalao confitado con crema de Bollit, que es algo muy típico de la cocina de Alicante.
¿Qué más platos habéis mantenido?: Mantengo también el confit de pato, que no es muy común encontrarlo hoy en día. Lo hacemos con un chutney de naranja y en Navidad lo hacemos con el Moscatel con pasas. Está de lujo.
¿Cuál es tu plato favorito de la carta?: Tenemos unas sardinas marinadas en cítricos sobre una base de ajo blanco que me encantan. Pero bueno también están las croquetas de boletus que me vuelven loca (risas). En este sentido te comunico que hemos sido seleccionados para participar en las Jornadas Gastronómicas del Restaurante Alfonso Mira de Aspe, y este es el plato que voy a hacer para representar al restaurante.
¿Qué previsiones tienes para el futuro? Seguro que ya tienes nuevas cosas en mente: Cuando monté este restaurante prometí que jamás me iba a volver a meter en una cosa así. El montaje, la obras..., todo es muy estresante y se pasa mal. Pero ya se me ha olvidado, seguro que algo viene (risas).
CURIOSITY: Jenny inauguró el Restaurante El Cup de Alicante el 17 de noviembre de 2017. La acogida fue muy buena y durante las dos primeras semanas todo eran clientes de siempre que se acercaban a conocer el nuevo proyecto. Jenny es una persona que genera vínculos y lazos de amistad con sus clientes. Su trato cercano y sensible, su manera de vivir esta profesión y carácter sociable favorecen, sin duda, esa base de clientela tan fiel que Jenny maneja en El Cup. Enhorabuena.
Restaurante El Cup Alicante
Carrer Poeta Campos Vasallo, 33
03004 Alacant
966 39 79 17
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